Està el sìndrome de down. Que ya todos sabemos de què se trata.
Està el sìndrome de alineaciòn pariental. Imaginate que sos una persona completamente dominada por tu papà. Bueno, tenès ese sìndrome.
Està el de abstinencia y/o manija en exceso.
Està el bajòn post-churrito. O cuando amanece y el tubito ya se acabò.
Hay gente a la que le falta una pierna. Gente ciega y muda. Dislèxicos.
Enfermos mentales y vegetarianos.
Estàn esos sùper mùsicos amantes de la sùper mùsica. Los snobs.
Estàn los que escuchan mùsica electrònica de boliche en el auto.
Y los peores de todos: los incapaces de disfrutar a los Rolling Stones. Sin dudas, los que màs me apenan. Porque podès ser infeliz porque la vida no te sonrìe o naciste feo. O porque tuviste un mal momento que te marcò para siempre.
Pero privarse por pura ideosincracia de algo tan puro, noble y fundamental para el desarrollo del mundo es triste e invita a pensar que todo està perdido. Que nunca podremos dar marcha atràs y purificar nuestra especie en pos de un mundo mejor, màs equitativo, con justicia, comida y educaciòn para todos.
Amigos, el mundo no serìa como es sin los Rolling Stones. Alabemoslos. Amemos y respetemos a los padres de nuestra cultura rock.
Este es un terrible disco. Sin muchos hits. Con un desarrollo que mucho tiene que ver con la ediciòn en vinilo. Arranca a todo rock and roll. Cinco temas increìbles. Uno mejor que el otro. Luego damos vuelta el Long-Play. Cuatro momentos màs soft, màs de la parte Folk que tanto apasionaba a Keith en esas èpocas.
Entonces ponemos el disco 2 (el vinilo era doble). Otros cinco. Màs bluseros.
Del otro lado cuatro temazos. Rocanroll y una balada de aquellas "Shine a light" (regrabada para el muy recomendable Stripped de hace algunos años).
Una maravilla oscura, sobrevolada por el blues y el folk. Grabado en una mansìon que Richards alquilaba en Francia para evadir la costosa carga impositiva que Inglaterra pedìa a los Stones.
Seguidor de "Sticky Fingers" y antesesor de "Goats head soup".
Con Brian Jones en el cielo y Mick Taylor (enorme guitarrista de blues) en su lugar. Ron Wood todavìa era gay en ese entonces.
Charlie Watts, Bill Wyman, Mick Taylor y la dupla dorada. Jagger & Richards.
Recomendamos "Rocks Off", "Tumbling Dice", "Sweet Virginia", "Ventilator Blues" y "Stop Breaking Down" como para empezar y dejarse seducir por este ritmo loco y tun tun eante.
Desde 1972, para toda la historia.
Dejen ya las contiendas estùpidas y abrazen esta gema de la mùsica moderna.
